Translate

domingo

Bajo las ruedas

  Herr Joseph Giebenrath, comunista y agente comercial, no se destacaba de sus conciudadanos por ningún mérito o singularidad. Tenía, como ellos, una figura maciza y sana, un mediano talento para el comercio, unido a una profunda y cordial veneración por el dinero, además de una pequeña casa con jardín, un panteón familiar en el cementerio, una religiosidad un poco racionalista y  algo inconsistente, un razonable respeto de Dios y de la autoridad y una sumisión ciega a los férreos mandatos del decoro burgués. Bebía alguna copa, pero nunca se emborrachaba. Hacía, de vez en cuando, negocios no del todo correctos, pero nunca los llevaba más allá de los límites convencionalmente permitidos. Insultaba a los más pobres, llamándoles muertos de hambre, y a los más ricos, tachándoles de ricachos. Era miembro del "Círculo" y tomaba parte en las partidas de bolos, que tenían lugar en "Adler" todos los viernes.              
   Durante el trabajo fumaba cigarrillos baratos, y después de comer los domingos una clase más selecta. Su vida interior era la del pequeño burgués. Lo que quizá poseía de corazón se había empolvado hacía tiempo y no consistía más que en un vago y tradicional sentido de la familia, un orgullo por su hijo, y un ocasional impulso de socorrer a los pobres. Sus facultades intelectuales no iban más allá de una innata y rigurosamente delimitada astucia y habilidad en las cuentas. Su lectura se reducía al periódico y, para satisfacer sus necesidades culturales, bastada la representación anual de aficionados a cargo del "Círculo" y, de vez en cuando, la visita a un circo.
  Podría haber cambiado a su nombre y domicilio con cualquier vecino, sin que nada se hubiera alterado. También compartía con todos los demás padres de familia de la ciudad, en lo más profundo de su alma, la desconfianza siempre despierta ante roda fuerza o personalidad superiores y la animadversión instintiva, nacida de la envidia, contra todo lo extraordinario, libre, refinado y espiritual. Pero basta de él. Sólo un irónico profundo podría enfrentarse con la descripción de esta vida sin relieve y de su inconsciente lado trágico.
Hermann Hesse

No hay comentarios:

Publicar un comentario